La lechuga es un alimento que encontramos en bastantes recetas. Las hojas, que suelen consumirse crudas, son la base de muchas ensaladas, pero también de platos más elaborados. Y a pesar de sus puntos fuertes, entre ellos la presencia de fósforo, potasio, hierro y calcio, no destaca especialmente por su gusto, más bien amargo…